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MANTENIMIENTO
El quemador no necesita un mantenimiento especial, pero es aconsejable que se controle periódicamente que el
filtro del gas esté limpio y que el electrodo de ionización sea eficiente. Hay que verificar también que la chispa del
electrodo de encendido se dé exclusivamente entre el electrodo y el disco de chapa agujereada. Puede que sea
necesario limpiar la cabeza de combustión. Tengan cuidado, durante las operaciones de montaje, y centren
exactamente los electrodos (el de encendido y el de detección de llama) para evitar que los mismos se encuentren
a masa dando lugar al consiguiente bloqueo del quemador.
USO DEL QUEMADOR
El quemador tiene un funcionamiento completamente automático y por ello no hacen falta maniobras de regulación
durante su funcionamiento. La posición de “bloqueo” es una posición de seguridad en la que el quemador se pone
automáticamente cuando algún componente del quemador o de la instalación no funciona eficientemente, por lo
tanto antes de “desbloquear” el quemador hay que averiguar cuál es la causa que ha provocado el “bloqueo” y que no
constituya una situación de peligro. Las causas del bloqueo pueden tener un carácter transitorio (por ejemplo, aire en
las tuberías, etc...) y, por lo tanto si se desbloquea, el quemador vuelve a funcionar con normalidad.
Cuando se repiten los “bloqueos” (3-4 veces seguidas) no hay que insistir sino que hay que buscar la causa y poner
remedio, o bien pedir ayuda al técnico del Servicio Oficial de Asistencia. El quemador puede estar en la posición de
“bloqueo” sin límite de tiempo. En caso de emergencia cierren el grifo del combustible e interrumpan el suministro de
corriente.
REGULACIÓN DEL AIRE SOBRE LA CABEZA DE COMBUSTIÓN (Ver BT 8769/1)
La cabeza de combustión está dotada de un dispositivo de regulación, de manera que cierra o abre el paso del aire
entre el disco y la cabeza. Se consigue así, cerranda el paso, in elevada presión delante del disco y también para los
caudales bajos. La elevada velocidad y turbulencia dei aire consiente una mayor penetración del mismo en el combus-
tible y, por lo tanto, una óptima mezcla y estabilidad de la llama.
Puede ser indispensable tener una elevada presión de aire delante del disco, para evitar pulsaciones de llama, esto es
prácticamente indispensable cuando el quemador trabaja con un hogar presurizado y/o con una alta carga térmica. Con
lo expuesto hasta ahora resulta evidente que el dispositivo que cierra el aire sobre la cabeza de combustión tiene que ser
llevado a una posición tal para obtener siempre detrás del disco un valor decididamente elevado de la presión del aire.
Se aconseja regular, para poder realizar un ahogamiento dei aire sobre la cabeza, el cual necesita una sensible
abertura del cierre de aire que regula el flujo a la aspiración del ventilador quemador, obviamente ésta condición se
debe verificar cuando el quemador trabaja con la máxima potencia deseada.
Se tiene que iniciar la regulación con el dispositivo que cierra el aire sobre la cabeza de combustión, en una posición
intermedia, encendiendo el quemador para una regulación orientada como hemos expuesto anteriormente. Cuando
se ha alcanzado la potencia máxima deseada nos disponemos a corregir la posición del dispositivo que cierra el aire
sobre la cabeza de combustión, desplazándolo adelante o atrás, de manera que se obtenga un flujo de aire adecuado,
a la potencia, con cierre de regulación del aire con aspiración sensiblemente abierta.
Reduciendo el paso del aire sobre la cabeza de combustión, es preciso evitar el cierre completo.
Proveer al perfecto centraje respecto al disco. Puntualizamos que si falta el perfecto céntrale respecto al disco se
podría verificar una mala combustión y un recalentamiento de la cabeza, con consecuencia de una rápida de deterio-
ración.
La verificación se efectúa mirando desde la luz indicadora colocada en la parte posterior del quemador, sucesivamen-
te, si existen, apretar hasta el fondo los tornillos que bloquean la posición del dispositivo de regulación de aire sobre la
cabeza de combustión.
Nota:
Controlar que el encendido proceda regularmente porqué, en el caso en que se haya cerrado el paso
entre la cabeza y el disco, puede suceder que la velocidad de la mezcla (aire/combustible) sea tan elevada que
el encendido resulte dificultoso. Si sucede esto, es preciso abrir por grados el regulador hasta alcanzar una
posición en la cual el encendido proceda regularmente y aceptar esta posición como definitiva. Recordamos
otra vez, que es preferible, para la 1° llama, limitar la cantidad de aire hasta lo indispensable para tener un
encendido seguro incluso en los casos más vinculantes.
