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Instrucciones de mantenimiento
El reloj que ha adquirido es una obra maestra de la electrónica y la
mecánica de gran precisión que puede indicarle la hora exacta durante
mucho tiempo. Protéjalo pues de los golpes, los campos magnéticos, las
altas temperaturas, el agua y productos químicos, así como del desgaste
causado por el roce.
Por ejemplo, para dormir, debería quitarse el reloj.
En el caso de que un reloj que funciona a pilas se quedará parado o indi-
cará la pérdida de carga de la pila, deberá llevarlo inmediatamente a un
establecimiento especializado para que la pila vacía no cause daños ni al
reloj ni al medio ambiente.
El cambio de la pila deberá efectuarse con una frecuencia de entre un
año, año y medio, en una establecimiento especializado. Aproveche la
ocasión y mande controlar también el estado de los elementos aislantes
del reloj y, en caso de ser necesarios, cámbielos.
En el caso de que se condensara agua (niebla bajo la esfera), lleve el reloj
inmediatamente a un establecimiento especializado para evitar que la hu-
medad dañe el mecanismo del reloj. Lleve siempre el reloj con la corona
roscada o atornillada.