Información de salud y seguridad 116
Los niveles de energía asociados con la energía de radiofrecuencia,
incluyendo ondas de radio y microondas, no son lo suficientemente
grandes como para causar la ionización de átomos y moléculas. Por
lo tanto la energía de radiofrecuencia es un tipo de radiación no
ionizante. Otros tipos de radiación no ionizante incluyen la luz
visible, radiación infrarroja (calor) y otras formas de radiación
electromagnética con frecuencias relativamente bajas.
Mientras que la energía de radiofrecuencia no ioniza partículas,
grandes cantidades pueden elevar las temperaturas corporales y
causar daño al tejido. Dos áreas del cuerpo, los ojos y los testículos,
son particularmente vulnerables al calor de radiofrecuencia porque
existe un flujo sanguíneo relativamente bajo en ellos para alejar el
calor excedente.
Resultados de investigación a la fecha: ¿Existe una conexión
entre la radiofrecuencia y ciertos problemas de salud?
Los resultados de la mayoría de los estudios realizados a la fecha
dicen que no. Además, los intentos por reproducir y confirmar los
pocos estudios que han demostrado una conexión han fallado.
Por lo tanto, la comunidad científica en general cree que el peso de
la evidencia científica no demuestra una asociación entre la
exposición a radiofrecuencia de teléfonos celulares y resultados de
salud perjudiciales. Aún así, la comunidad científica ha apoyado
investigaciones adicionales para atender la disparidad en lo que se
sabe. Algunos de estos estudios se describen a continuación.
Estudio de interfono
Interfono es un gran estudio internacional diseñado para determinar
si los teléfonos celulares elevan el riesgo de cáncer en la cabeza y el
cuello. Un informe publicado en el International Journal of
Epidemiology (junio de 2010) comparó el uso de teléfonos celulares
de más de 5,000 personas con los tumores cerebrales (glioma y
meningioma) y un número similar de controles saludables.
Los resultados de este estudio NO demostraron que los teléfonos
celulares causaron cáncer cerebral. En este estudio, la mayoría de
las personas no tuvieron un mayor riesgo de cáncer cerebral por
usar teléfonos celulares. Para personas con el mayor uso de
teléfonos celulares (un promedio de más de ½ hora al día, todos los
días, por más de 10 años) el estudio sugirió un ligero aumento en
cáncer cerebral. Sin embargo, los autores determinaron que
parcialidades y errores previnieron que se dedujeran conclusiones
de estos datos. Puede encontrar información adicional sobre el
interfono en
http://www.iarc.fr/en/media-centre/pr/2010/pdfs/
pr200_E.pdf.
Interfono es el estudio de teléfonos celulares más grande hasta hoy,
pero no respondió todas las preguntas sobre la seguridad de los
teléfonos celulares. Se están realizando investigaciones adicionales
en el mundo y la FDA continúa supervisando desarrollos en este
campo.